Ettore Messina revela la historia del tatuaje post-tricolor

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«Son esas cosas que haces con tus hijos y para tus hijos».

Protagonista de un largo discurso en el Festival del Deporte de Trento, al que acudió como invitado, Ettore Messina habló largo y tendido sobre su experiencia ganadora al frente del Olmpia Milano, ampliando el discurso a temas relacionados con el concepto de «equipo ganador» en el deporte y contando también una sabrosa anécdota sobre el tatuaje que se hizo tras la victoria en la serie final contra el Virtus de Bolonia.

«Nicolò Melli había dicho durante el año ‘no estamos aquí para vengar nada’. Sin embargo, recuerdo cómo llegamos a esa serie y cómo todo el mundo estaba en ella. La derrota te hace aún más humilde de lo que eres: si el talento se combina con el realismo, se suelen obtener resultados», comenzó.

«¿El tatuaje? Son esas cosas que haces con tus hijos y para tus hijos. Está en la edad en que las hormonas le salen por las orejas. Antes de los playoffs hablábamos y una mañana me dijo ‘ahora tienes que ganar’. ‘Felipe, han incorporado a Hackett y Shengelia, son un equipo complicado, más fuerte que el año pasado’, respondí.. Estaba preocupado. Se mostró confiado y dijo: ‘Ganamos’. Si lo hacemos, te haces un tatuaje’. Se lo dije. Terminó el partido, corrió a abrazarme y me dijo ‘mañana me hago un tatuaje’. Me fui con él, pero al final no me arrepiento porque lo que queda de este campeonato es el hecho de que lo ganamos bien, que superamos momentos difíciles, que nos acercamos a la tercera estrella.

Por último, una advertencia que llama al equilibrio y a la mala costumbre de poner etiquetas: «En Italia abusamos del concepto de equipo ganador y de entrenador ganador. En el que sólo los que ganan son ganadores y los demás son tontos. No es así, el concepto de ganador se configura con aquellos que tienen la capacidad de jugar al máximo. A veces es suficiente y otras no, pero siempre te vas a casa con la conciencia tranquila. En este sentido, nuestra selección fue ganadora, incluso con la mala suerte de los dos tiros libres fallados. Sin Simone Fontecchio no habríamos estado donde estamos, esta es la parte cruel del deporte», concluyó.

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