Alessia Trost relata su largo calvario
Alessia Trost relata las dificultades del último año y medio
Alessia Trost por fin está lista para volver a empezar. Tras participar en los Juegos Olímpicos de Tokio en el verano de 2021, la saltadora de altura nacida en Pordenone pasó por un larguísimo calvario, que en los dieciséis meses siguientes la llevó a competir sólo nueve veces más. Todo por culpa de una lesión difícil de tratar porque no estaba localizada con precisión, según explicó la propia atleta italiana a ‘La Gazzetta dello Sport’.
Había mañanas en las que, después de entrenar el día anterior, tardaba 10′ en levantarme de la cama. Sufría problemas musculares y articulares, sobre todo nerviosos. Mi espalda tiene varias protuberancias, mi columna se resiente. No sufrí una lesión específica, sino un estado inflamatorio general muy fuerte. La primavera pasada intentaba saltar y no podía levantarme del suelo. Así que en junio, de acuerdo con la federación, decidí desconectar por un tiempo».
El difícil momento aún no ha quedado atrás, pero se muestra optimista de cara al futuro: «No me adelanto a los acontecimientos», afirma, «lo importante es dejar de sentir dolor, recuperar la eficacia física. Es una apuesta total: voy por detrás, no lo haré bajo techo. Pero pienso volver a competir al aire libre. La elección está clara.
