Amedeo Della Valle asusta al Olimpia de Milán
Las palabras de Mario Fioretti
A pesar de ser la jornada número 23 de 30 partidos, para el Olimpia la de Brescia representa el antepenúltimo partido fuera de casa de la temporada regular. En los últimos siete partidos, de hecho, jugará cinco veces en casa, viajando sólo a Verona y Tortona. El Olimpia tiene que defender la segunda plaza del asalto del Tortona, que está a una victoria, y aún puede perseguir la primera, también a una victoria (en los enfrentamientos directos, el Milan tiene ventaja sobre el Bolonia en caso de empate). El partido, sin embargo, es complicado, como dicen los precedentes: el Olimpia sufrió para ganar al Brescia en casa y perdió el partido de cuartos de final jugado en Turín. Se jugará en un estadio con las entradas agotadas, como casi siempre ocurre en los partidos fuera de casa, y el Brescia se jugará in extremis su última oportunidad de recuperar la eliminatoria. Por último, el Olimpia ha disputado dos duros partidos de Euroliga y afrontará este encuentro menos de 48 horas después del anterior compromiso y a otras 48 horas del siguiente, a domicilio en Estambul. Entre los extranjeros seguirán ausentes Devon Hall y Kevin Pangos; entre los italianos, Gigi Datome y Paul Biligha. Tommaso Baldasso tuvo problemas gripales durante la semana, pero está disponible.
«Nos enfrentamos al equipo que acaba de ganar la Copa de Italia. Somos conscientes de la calidad y la profundidad de su plantilla. Para nosotros se trata ante todo de prestar mucha atención a sus guardias, especialmente a Della Valle y Petrucelli, que son el motor de su sistema de juego», declaró Mario Fioretti, adjunto de Ettore Messina, en la víspera del partido.