Gregorio Paltrinieri se lleva el oro con la carrera de relevos
Gregorio Paltrinieri d'oro
Entre corrientes, medusas, troncos y espuma, Italfondo ha recogido una medalla de oro que nunca había nadado. El título de clausura en la playa Seaside Momochi de Fukuoka è Italia campeona del mundo, ganando el 4×1500 con la debutante Barbara Pozzobon y tres cuartas partes del equipo campeón de Europa y bronce mundial saliente: Ginevra Taddeucci, Domenico Acerenza y Gregorio Paltrinieri.Los Azzurri triunfaron con la llegada en solitario del dominador de las aguas (saladas, dulces y cloradas, poco importa), SuperGreg, que alcanzó la meta en 1h10'31"2 antes de subir de nuevo al pontón y lanzarse al abrazo de sus compañeros. El último en caer fue el húngaro David Bethlem (1h10'35"2), que no pudo seguir el ritmo del capitán, que ahora tendrá un par de días de descanso antes de ponerse en modo piscina para los 800 y 1500 metros. El tercer puesto fue para Australia en 1h11'26"7, lo que dejó fuera del podio a Alemania, pentacampeona defensora del título, con la italiana Leonie Beck en el equipo, pero no a Florian Wellbrock, que ya había ganado tanto los 10 kilómetros como los 1.500 en Gwangju, para lo que había sido dispensado.Se trata de una medalla de oro inédita para Italia, que había ganado una medalla similar por la suma de tiempos individuales en Sharm el Sheikh en 2002, cuando aún se disputaban los campeonatos del mundo de la especialidad, con Luca Baldini, Stefano Rubaudo (ahora coordinador técnico del equipo italiano) y Viola Valli. La única novedad es Barbara Pozzobon, que ocupa el lugar de Gabbrielleschi, del lago Lupa del año pasado, y de Bruni, de los campeonatos continentales.
Comentario de Paltrinieri: "Estamos encantados, è la primera vez que ganamos el oro en los Campeonatos del Mundo. Hemos ganado de todo y a todos a lo largo de los años, pero nos faltaba esta medalla y nos hacía mucha ilusión. En la carrera, hicimos una estrategia de locos. Ayer estudiamos a los adversarios, los recorridos, el ritmo, los tiempos. Todos éramos buenos. Las chicas para mantener la posición y seguir los recorridos y senderos adecuados. Entonces Acerenza me dio el cambio adecuado. Le había pedido a Mimmo que me dejara salir primero, en cabeza, no detrás ni de Hungría ni de Alemania. Lo consiguió y me mantuve en cabeza. El campeonato del mundo no había empezado de la manera correcta, sin medallas y sin pase olímpico, pero la condición fue creciendo con el tiempo. Sabemos lo fuertes que somos. Debemos intentar expresarlo siempre, a pesar de las dificultades, aunque objetivamente el proyecto de campo a través vaya muy bien. Esta medalla es una prueba de ello. Hemos soñado muchas veces con ganar el oro en los Mundiales por equipos y por fin lo hemos conseguido.
Comentario de Acerenza: "Hemos volcado olas y rivales. Hemos estado fantásticos. Pozzobon y Taddeucci gestionaron las fracciones, haciéndome salir sin una brecha estrepitosa. Manejé bien las corrientes. Sabía que cada segundo era importante, así que en los últimos 50-60 metros puse las piernas a tope. Sabía que era el último sprint del campeonato del mundo y dejé toda mi energía en el agua para complacer a Paltrinieri, que me había pedido que saliera en cabeza. Luego terminó genial. Después del cambio estaba casi seguro del éxito, pero mientras no te toques puede pasar cualquier cosa y el mar hoy estaba difícil; era importante evaluar bien las corrientes, evitar los obstáculos, adaptarse. La fracción de Greg é era interminable. Lo bonito fue cantar el himno de Mameli todos juntos. Como un equipo, con el equipo. Hay unidad, fuerza, compacidad. Italia è fuerte".
Comentario de Taddeucci: "Vaya, qué emoción. Somos campeones del mundo. No hemos dejado nada al azar. Cambios perfectos. Sincronización total. Carrera ejecutada según lo estudiado. Hay mucha satisfacción. He podido seguir el ritmo de Leonie Beck y dar un buen cambio a Acerenza. Somos un gran equipo.