Matteo Berrettini cuenta su drama: «Oscuridad sin fin
Matteo Berrettini habla de su drama: "Oscuridad sin fin"
Matteo Berrettini se ha sincerado en una entrevista concedida al Corriere della Sera, en la que relata los difíciles meses posteriores a su lesión y su renacimiento en Wimbledon.
El tenista romano, tras un 2022 plagado de lesiones, se topó con los mismos problemas en la primera parte de 2023: una pesadilla que le hizo caer en picado en la clasificación. Experimenté demasiados desgarros mentales y físicos. Hubo momentos en los que mi cabeza y mi cuerpo no estaban alineados, pedía demasiado a uno u otro. Clínicamente era un desgarro del oblicuo interno. Creo que le pedía demasiado a mi cuerpo. Si la cabeza se engaña pensando que se siente bien y el cuerpo se siente mal, pagas el precio que yo pagué".
Berrettini hablaba de la oscuridad que le engullía en esos momentos: "Y la oscuridad parece no tener fin, parece que te engulle porque en lugar de quedarte quieto y descansar, te hundes en un abismo. Eran momentos malos, que no me gustaban. Pero fueron fundamentales para hacerme redescubrir las razones de la alegría de hacer lo que empecé de niño y que ha ocupado toda mi vida. Volví la mirada a mis orígenes para reencontrarme conmigo mismo. La oscuridad me dio el espacio para hacerlo".
Los haters en las redes sociales le hicieron daño: "Me di cuenta de que mi estado de ánimo cambiaba en relación con el tono de un centenar de personas que escribían sus comentarios legítimos, pero a menudo injustos, que caían directamente en mis manos. Me di cuenta de que mi estado de ánimo tenía que depender de algo más que eso. Me parecía injusto que, por algo que tenía que ver con mi físico, tuviera que tragarme tanta mala leche. Que todos los que me habían animado desaparecieran o se convirtieran de repente en jueces u odiadores. Al fin y al cabo, mi cuerpo dolorido me inmovilizó e intenté defenderme con todas mis fuerzas. Pagué el precio más alto. Allí me faltaba esta solidaridad elemental. Me dolía no encontrar esta sensibilidad.
Berrettini confesó haber pensado en dejarlo todo: "En 2020 tuve un año complicado y recuerdo haber tenido la idea, que me ayudó a dormir, de coger mi pasaporte, no decir nada a nadie y huir donde nadie pudiera encontrarme. Se me ocurrió pensarlo, en los días oscuros. Pensé: ¿por qué tengo que soportar toda esta presión, la culpa por mi cuerpo herido? La vida è no tiene repeticiones. Pero luego el tiempo, la confrontación con los demás, me hicieron darme cuenta de que sólo soy feliz si salgo y respiro esa atmósfera. Y soy infeliz si no lo hago: è una magnífica condena…".