Fabio Quartararo revela su problema y cómo lo afrontó

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La admisión de tener un problema, la madurez para buscar ayuda.

Fabio Quartararo se sincera al final de un año muy delicado, en el que además de los problemas en pista con su Yamaha también ha admitido luchar contra algunos demonios personales. Dificultades que no eran recientes, pero que el francés ha decidido afrontar de frente cuestionándose a sí mismo. Y dando importantes pasos adelante desde entonces.

Quartararo reveló a la web oficial de MotoGP que había tomado la decisión de contar con ayuda psicológica desde 2021, cuando su Yamaha comenzó su declive. "Mi problema è el de enfadarme muy rápido por cualquier cosa’, explicó el piloto de Niza. Nunca he faltado al respeto a nadie, pero gritar no ayuda a hacerse entender. Así que me puse en manos de un coach mental, y eso me ayudó tanto en el enfrentamiento con los mecánicos como en mi vida personal".

Quejarse no es suficiente, entre otras cosas porque no ayuda a los que tienen que poner las manos en la moto. Lo que hace falta, en cambio, es entender lo que no funciona e identificar los puntos débiles. Lo he aprendido con el tiempo y me ha resultado muy útil. Sobre todo para darme un enfoque proactivo incluso cuando las cosas no van bien. Porque esos son precisamente los momentos en los que más se puede aprender», añadió Quartararo.

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