El Atalanta, imparable ante el Génova en el Ferraris; el Dea, cada vez más cuarto
Cuarta plaza confirmada, como el momento de forma excepcional del belga.
El Atalanta también estuvo imparable en el Ferraris, donde sumó su cuarta victoria consecutiva en Serie A ante el Génova (pero la primera a domicilio desde el 30 de octubre) y confirmó su cuarto puesto en la tabla, lo que supondría el regreso a la Liga de Campeones a final de año. Para los hombres de Gian Piero Gasperini terminó 4-1, y una vez más entre los protagonistas estuvo un Charles De Ketelaere definitivamente revitalizado.
Los visitantes empezaron con fuerza, pero no lograron desbloquear el resultado por medio de Holm, Scamacca y De Ketelaere. Pero fue el propio belga quien apareció en el minuto 23, recogiendo una asistencia de Pasalic con la derecha y enviando el balón a la red con un zurdazo letal. El ambiente en el campo se caldeó (una amonestación para los anfitriones, dos para los invitados), y después de un nuevo peligro creado por De Ketelaere fueron Vásquez y Retegui los que cometieron Carnesecchi.
El Génova è en el partido, y lo demostró con un arranque de cohete en la segunda parte: tras dos ocasiones de Retegui y una de Frendrup, llegó el gol del empate a los 51 minutos y lo firmó el gran ex sobre el terreno de juego. Fue Malinovskyi, que recibió de Badelj y batió a Carnesecchi con su especialidad de casa: un zurdazo lejano. Sin embargo, el Atalanta no se dejó amedrentar y se adelantó ya en el minuto 55 gracias a un perfecto lanzamiento de falta de Koopmeiners. El tercero parecía llegar en el 76' con un golazo de Scalvini, pero Var detectó fuera de juego tras un control cercano a la marca de los 10 minutos. Esto justificó una recuperación récord, que permitió a los invitados ampliar su ventaja: tras un milagro de Carnesecchi sobre Gudmundsson, de hecho, en el 100' Zappacosta triplicó en un contragolpe e incluso en el 103' El Bilal Touré marcó de cabeza, excelentemente servido por Miranchuk y en su debut absoluto en la Serie A.