Mattia Furlani se muestra incrédulo tras escribir la historia
La incredulidad ante la hazaña va acompañada de una precisa táctica de carrera.
Mattia Furlani reescribió la historia del atletismo italiano al ganar una histórica medalla de bronce en salto de longitud en los Juegos Olímpicos de París 2024, que no sólo representa la primera medalla italiana en atletismo en esta edición de los Juegos, sino también la primera en la disciplina desde 1984. No solo eso, sino que el joven del Lacio (nacido en 2005) se convierte en el atleta más joven en ganar una medalla para Italia en los últimos 100 años.
La conciencia de la hazaña queda clara en las palabras que Furlani eligió en su entrevista con 'Sky Sport': "Ganar la medalla de bronce hoy ha sido realmente increíble. Lo he dado todo en la pista, hasta el último empujón. Ha sido algo realmente emocionante y ahora estoy agotado, porque realmente he dado todo lo que podía dar. Ha sido increíble.
Sin embargo, el hecho de haber ganado una medalla en los Juegos Olímpicos cuando aún era júnior fue algo que Furlani admitió que tenía que terminar: "Todavía no. Porque estaba tan concentrado en esforzarme al máximo que mentalmente me aislé de todo. Veía el estadio vacío, sólo veía a mi madre. Una sensación impresionante, la medalla en los Juegos Olímpicos è algo que hasta hace dos años no podía ni imaginar".
A pesar de la emoción y de la corta edad, sin embargo, la estrategia de competición de Furlani fue muy clara: "En cada salto esperaba mucho a que el viento amainara, o quizá girara un poco a mi favor y me ajustara. De hecho, como se ve en los saltos, esperé mucho. Lo hice precisamente por el viento, con la esperanza de que tuviera un efecto positivo y no negativo en mi rendimiento. Hoy paraò era indomable".