El Milan se engaña y el Liverpool se ve desbordado. Maignan cae
El Anglo se engaña a sí mismo, luego el Liverpool le arrolla. Maignan cae
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El Milan cayó derrotado por 3-1 ante el Liverpool en su estreno en la Liga de Campeones en San Siro: tras el golazo de Pulisic, los Reds dieron la vuelta al resultado gracias a los tantos de Konat, Van Dijk y Szoboszlai. Para el técnico Paulo Fonseca, Mike Maignan también se lesionó: es probable que el portero se pierda el derbi contra el Inter, y podría ser sustituido por el joven Lorenzo Torriani.
El comienzo del partido fue cosa de tardes mágicas: Pulisic, provocado por Morata, esprintó 40 metros a través de un abismo en la defensa inglesa y batió a Alisson. Los Reds entraron en el partido con el paso de los minutos, y el primer tanto llegó de la mano de Salah, que estrelló un balón en el larguero en el minuto 17.
En el minuto 23 llegó el empate: Maignan, que no estaba en su mejor momento por unos problemas físicos, juzgó mal el lanzamiento de falta de Alexander-Arnold y Konaté lo aprovechó para enmarcar el 1-1. El Diablo pasó apuros y Salaha estrelló otro balón en el larguero, preludio del gol que llegó al final del periodo en otro lanzamiento de falta: en el minuto 41, tras un saque de esquina, Van Dijk dobló el marcador con un remate de cabeza franco y puso por delante a los invitados.
En la segunda parte, el Liverpool siguió haciendo su juego y creando ocasiones, mientras que Fonseca tuvo que lidiar con la lesión de Maignan, que tuvo que salir por Torriani. El Milan intentó reaccionar para empatar, pero las mejores ocasiones fueron para los ingleses, que hicieron el tercero con Szboszlai en el minuto 67: Gakpo batió a Pavlovic y sirvió al húngaro para que éste marcara el gol que sentenciaba el partido. Tras el 3-1, los rossoneri intentaron generosamente reabrir el partido, pero no tuvieron fuerzas para ello, a pesar de un error de Alisson en el 72, Abraham desperdició el esfuerzo. En los minutos finales del partido, Theo Hernández è el último fuego para el Milan, que se vio obligado a rendirse ante la fuerza de su rival (Chiesa debutó en la segunda parte).