Andrea Conti dice basta a los 31: "Estoy agotado"

Andrea Conti cuelga oficialmente las botas a los 31 años. La decisión la ha anunciado él mismo en una larga entrevista concedida a la “Gazzetta dello Sport” en la que ha repasado las distintas etapas de una carrera decididamente condicionada por las lesiones.

“Estoy agotado, llevo años luchando con problemas físicos, lesiones y decepciones. Llevo un año de baja y en los tres últimos sólo he jugado nueve partidos. Hay que ser consciente de la situación, no puedo más y ésta será mi decisión final. Lo dejo” comenzó diciendo el ex lateral del Atalanta.

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“He perdido la esperanza. Sabía que después del final de mi contrato con la Sampdoria no sería fácil y lo he visto en estos meses en los que nadie me ha llamado. Así que es mejor aceptar que se ha acabado y seguir adelante. No hay día en que abra los ojos y no piense en mi rodilla. Hablo de momentos de la vida, no sólo mientras juego. Por ejemplo, no puedo&#8217 arrodillarme, agacharme” continuó el ex jugador del AC Milan.

“No sé lo que haré ahora. No quiero tomar decisiones precipitadas, sólo tengo ganas de decir que todavía me veo en el fútbol. Soy un hombre de campo, quizá me gustaría ser entrenador, pero aún es pronto para decirlo. Todavía estoy metabolizando que no volveré a jugar. He tenido mala suerte en mi trayectoria, pero sé que la vida no acaba aquí. Sin duda haré otra cosa. No hay por qué esconderse, aunque cueste aceptarlo. Todo es trabajo mental. Para mí, un sueño se acaba, pero para mí, últimamente, ir al campamento ya no era una alegría. Me arrastraba, ya no era yo, añadió el oriundo de Lecco.

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“Personalmente le debo mucho a Gasperini y sólo puedo hablar bien de él: te masacra en los entrenamientos, te empuja a darlo todo, pero luego en el campo el domingo recoges los frutos. Con él vuelas y siempre sabes lo que tienes que hacer sin que él te diga nada más. No es una persona que hable mucho con los jugadores, pero siempre consigue tocar la fibra sensible cuando es necesario. También me llevaba bien con Pioli, cuando llegó al AC Milan empecé a jugar siempre, luego me lesioné y a partir de entonces desaparecí para él. Fue como si no me viera, no me dio explicaciones ni nada. Aquello fue una bofetada decisiva para mi carrera, porque me sentía bien” concluyó Andrea Conti.