Gran celebración en Turín por la expulsión de Juan Cuadrado
El partido de Coppa Italia entre Torino y Pisa deparó un momento que permanecerá en la memoria de los aficionados mucho más allá del resultado final: la expulsión de Juan Cuadrado. El ex jugador de la Juventus, ahora en las filas de los toscanos, vio la tarjeta roja directa en la segunda mitad del encuentro, lo que provocó la celebración de la afición local.
Al minuto de la decisión arbitral, el rugido del Grande Torino fue atronador. Miles de voces acogieron la decisión con coros y aplausos, convirtiendo la salida del colombiano del terreno de juego en una especie de liberación simbólica.
Cuadrado, blanco predilecto de la curva granata durante sus años en la Juventus, abandonó el terreno de juego entre silbidos y coros irónicos, acompañado de una ovación que olía a revancha deportiva.
La escena apareció como el cumplimiento de una larga cuenta pendiente entre el público de Toro y uno de los protagonistas de las batallas ciudadanas de la última década. Para la afición granata, la expulsión del ex jugador de la Juventus tuvo el sabor de un derbi ganado por la distancia, un episodio celebrado como un trofeo ideal, independientemente del desarrollo del partido.
