Andrey Rublev conmovido en Montecarlo: «Sentí como una maldición
Una primera vez celebrada con gran emoción.
Andrey Rublev venció a Holger Rune para ganar el primer Masters 1000 de su carrera en Montecarlo. Un éxito sudoroso, que llegó tras 2 horas y 36 minutos y tres sets (5-7, 6-2, 7-5). Pero que, sobre todo, acaba con una auténtica maldición para él.
«No sé qué decir», comentó calurosamente Rublev, «estoy feliz, por fin he conseguido después de una dura lucha ganar uno de estos Masters 1000. Parecía una maldición. Iba perdiendo 4-1 con un punto de ruptura y pensé que ya no podría ganar. En cambio, de alguna manera lo conseguí».
«Esperaba al menos tener una pequeña oportunidad. Pensé que podría llegar hasta el final. En mis finales anteriores no estaba mentalmente preparado, sentía que no podía ganarlas», admitió Rublev. «Pero esta vez me dije que al menos tenía que creerlo hasta el final. Así que conseguí remontar y al final lo logré. Ahora no quiero pensar más en ello, sólo descansar y tomarme un descanso del tenis.