Roma, Paulo Dybala no juega: ¿despedida en enero?
Renovación con los giallorossi sólo bajo ciertas condiciones
Momento negro en los giallorossi. Además del asunto del nuevo entrenador, el club debe lidiar con el dolor de estómago de Dybala, que atraviesa un momento ciertamente poco feliz. No fue convocado para el partido contra el Bolonia, se quedó en el banquillo contra el St Gilloise y jugó poco más de 20 minutos contra el Hellas Verona.
Hasta la fecha sólo ha jugado nueve partidos de liga (varios como suplente) con dos goles en su haber. Poco, muy poco para el que se supone que es el as del equipo. El entusiasmo por su no a la suculenta oferta del Al-Qadsiah ya se ha disipado. De hecho, hay quien piensa que debería haber aceptado los 75 millones que le ofrecía el rico club árabe (contrato de tres años).
Por si fuera poco, para activar la renovación automática con el club giallorossi, Dybala debe jugar un determinado número de partidos. Está por ver si es una vía viable, a tenor de las numerosas lesiones que están afectando a su rendimiento. Si no está en plena forma, la Joya no podrá marcar la diferencia en el campo como le gustaría.
Llegados a este punto, no se puede descartar la posibilidad de que decida marcharse en enero. Evidentemente, mucho dependerá del nuevo entrenador de la Roma. Un cara a cara entre ambos podría cambiar las cartas sobre la mesa. Por el momento, Dybala no está contento con la Roma y viceversa.