Florete, en plein Italia: campeón del mundo por equipos masculino
El florete del mundo habla italiano.
Tras el arrollador éxito del viernes de las esgrimistas de florete femenino, que volvieron al techo del mundo, el sábado las esgrimistas de florete no fueron menos impresionantes y dieron a Italia su segundo oro arco iris y su octava medalla de los Campeonatos del Mundo de El Cairo 2022.
En Egipto, el equipo compuesto por Daniele Garozzo, Tommaso Marini, Alessio Foconi y Guillaume Bianchi superó en la final a Estados Unidos por 45-39 en un partido muy disputado que se resolvió en los momentos cruciales por un Marini en gran forma, también fuerte tras ganar su medalla de plata individual.
Los chicos del CT Stefano Cerioni habían saltado a los octavos de final como cabezas de serie número 1 y debutaron el viernes con un éxito frente a Uzbekistán por 45-31, y luego se impusieron a Brasil por 45-17. El sábado se aseguró un puesto entre los cuatro mejores equipos del evento tras vencer a Corea por 45-31 y luego, en las semifinales, superó a Japón por 45-33 para tomarse la revancha contra los nipones que les eliminaron en los cuartos de final de los Juegos Olímpicos de Tokio 2020.
El título mundial confirma el dominio mostrado durante la temporada: los esgrimistas italianos de florete, que lideran la clasificación internacional, ya han ganado el oro europeo y, de las cuatro pruebas de la Copa del Mundo celebradas, han conseguido ganar tres y subir al tercer escalón del podio en la otra.
El resultado de hoy también amplía la estela de resultados de la selección italiana: es desde 2013 que el florete masculino italiano siempre ha medallado en la prueba arcoíris y este es el quinto éxito en las últimas siete ediciones (oro en 2013-2015-2017-2018-2022, bronce en 2014 y 2019).
«Fue un día precioso -dijo Daniele Garozzo- y se vio que somos un equipo: cuando uno hace un poco menos el otro sale. Tuvimos una bonita racha, 3 victorias de 4 en la Copa del Mundo, el Campeonato de Europa, el Campeonato del Mundo… mejor que eso era difícil de imaginar».