Dallavalle e Ihemeje, a un paso del podio mundial
Campeonato del Mundo en Eugene
El podio, y luego los Azzurri. Uno tras otro, cuarto y quinto. La medalla de bronce mundial no está lejos para Andrea Dallavalle, cuarta del mundo con 17,25 (-0,2), a seis centímetros de la china Zhu Yaming (17,31/-0,8), tercera. Por otro lado, hubo un quinto puesto para Emmanuel Ihemeje, que fue capaz de saltar 17,17 en la última ronda, impulsado por el viento de +2,6 que tenía detrás, y superar así al estadounidense Donald Scott (17,14/+0,9). En general, fue una actuación coral muy positiva para el triple salto italiano diez años después de la medalla de bronce olímpica de Fabrizio Donato en Londres y del cuarto puesto de Daniele Greco. Nunca un italiano había sido cuarto en los Campeonatos del Mundo: como mucho, antes de hoy, el quinto puesto de Paolo Camossi en Sevilla con el entonces récord italiano de 17.29.
A pesar de la inevitable pena por una medalla que nunca estuvo tan cerca, Dallavalle se encuentra ahora, a todos los efectos, entre los mejores saltadores de saltos del mundo, ascendiendo de forma decisiva desde el noveno puesto de los Juegos Olímpicos de Tokio: «El objetivo era mejorar el puesto de los Juegos», dijo. «Fue una competición muy consistente, y sólo me comí un poco las manos por el segundo salto: me pareció muy bueno y en cambio me desequilibré.
El salto más largo fue el primero, los 17,25 que le impulsaron al bronce virtual, una euforia que duró apenas unos minutos, hasta los 17,31 de Zhu, que se quedaron en la cifra del tercer puesto. Mientras tanto, el portugués Pedro Pablo Pichardo ya se había hecho con la final con un suntuoso 17,95 (+0,3), la mejor marca mundial de 2022, cuarenta centímetros más que los 17,55 (+1,4) de Fabrice Hugues Zango, válidos para la medalla de plata de Burkina Faso. De hecho, la situación se cristaliza hasta el final, con el atleta nacido en Piacenza y entrenado por Ennio Buttò que también deja un 17,16 en la arena, renuncia al tercer salto, continúa con 17,12 y cierra con dos nulos.
También hubo que aplaudir al ídolo local Ihemeje, de Bérgamo, estudiante de la Universidad de Oregón, que ganó los tres saltos finales con un 17,03 (+0,5) en la segunda ronda y luego lo aumentó en la última: «Me costó un par de saltos encontrar el ritmo», dijo, «Ahora hay que agachar la cabeza, seguir trabajando y creer en ello hasta el final».