Lorenzo Musetti como Jannik Sinner, el riesgo de otro no a Italia
Ocho semanas de carrera alrededor del mundo en busca de la clasificación para las Finales han dejado huella en Lorenzo Musetti. Un tour de force físico, técnico y emocional que le ha agotado, y ahora, en vísperas del partido decisivo contra Carlos Alcaraz, el tenista de Carrara se encuentra teniendo que gestionar fuerzas y prioridades.
De hecho, inmediatamente después de Turín, le espera la Copa Davis: otra semana de intensos compromisos que, de momento, parece una montaña difícil de escalar. A Musetti le gustaría estar allí, pero la decisión final sólo se tomará junto con el capitán Filippo Volandri y su equipo una vez finalizada la fase final.
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Un enfoque prudente, en línea con el adoptado por Jannik Sinner, que renunció a la Davis para permitirse una semana extra de descanso y preparación atlética. Incluso para Musetti, que viene de un periodo agotador, la posibilidad de tomarse un respiro podría ser crucial para recuperar energías y evitar repercusiones al inicio de la próxima temporada.
En el último mes, el italiano de 22 años ha jugado seis partidos en siete días -siete con el partido de mañana-, incluida una final de tres horas contra Djokovic en Atenas, antes de volar a Turín para el torneo de Maestros. A ello se suma un aspecto personal nada desdeñable: la inminente llegada de su segundo hijo.
Volandri y el personal están evaluando cuidadosamente todos estos elementos: la alineación de Italia puede sufrir modificaciones hasta el lunes, y aún queda tiempo para decidir.
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