Ettore Messina, homenaje a Spanoulis
Las palabras de Ettore Messina
Ettore Messina ha hablado antes del partido contra el Olympiacos, que estará marcado por la retirada de Vassilis Spanoulis: «Fue un jugador con unas cualidades increíbles que influyó en una generación de deportistas y aficionados de toda Europa con su creatividad, sus jugadas decisivas y su longevidad.
Nunca tuve la oportunidad de entrenarle, pero experimenté lo difícil que era entrenar a un jugador que era una pesadilla para todos nosotros, los entrenadores. Y no sólo era un gran luchador y un jugador ganador, sino también un oponente de clase y una persona de calidad.
Diego Flaccadori, Giordano Bortolani y Guglielmo Caruso son los tres nuevos fichajes italianos del Olimpia, que llegan para darnos frescura y profundidad», afirma el director general Christos Stavropoulo, «Flaccadori ya tiene una buena experiencia a sus espaldas, Caruso tiene un gran margen y Bortolani es un chico de nuestra cantera, así que estamos doblemente orgullosos de que esté con nosotros. Su historia è un mensaje para todos los chicos de nuestro sector juvenil. Como dijo el entrenador Messina y también subrayó Mirotic hace dos días: lo que nos den en la liga nos ayudará a estar mejor preparados también en la Euroliga.
Los tres debutaron en Vigevano en un partido amistoso, con excelentes respuestas. Estábamos un poco tensos porque era el primer partido, es normal estar nervioso, pero aun así intentamos hacerlo lo mejor posible», afirma Bortolani.
"El baloncesto è un juego de errores, el que comete menos errores gana – dijo en particular Flaccadori -. Tienes que jugar tratando de tomar las decisiones correctas y no te preocupes si, cometiendo un error, tienes que volver al banquillo. Seguro que ocurrirá. Ningún jugador estará nunca completamente satisfecho con lo que è por eso intentas mejorar. En 2018 lamenté no poder jugar la final del campeonato cuando estaba en Trento, pero elegí Olimpia también porque me gustaría ganar y espero hacerlo pronto. Cuanto más tiempo pasa, más sientes ese deseo. Ya había probado la Euroliga, quizá me fui a Múnich demasiado pronto, pero no veía el momento de volver a esta centrifugadora. En un minuto o en treinta siempre hay que darlo todo, me doy cuenta de que decirlo es una cosa y hacerlo es otra.