El Milan se desatasca con Pulisic y Reijnders, noche de récord (con pesar) para Camarda
Liga de Campeones, Milán-Club Brujas 3-1
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Tras perder sus dos primeros partidos de la temporada europea ante el Liverpool y el Bayer Leverkusen, el AC Milan desbloqueó su situación en la Liga de Campeones al imponerse por 2-1 al Club Brujas en San Siro, agradeciendo el talento de Christian Pulisic y la concreción de Tijjani Reijnders, decisivos para los tres primeros puntos conquistados en la nueva edición de la máxima competición europea.
El lienzo táctico quedó claro desde los primeros minutos: el Milan apostó por la posesión del balón, los belgas por los contragolpes y un planteamiento bastante agresivo, hasta el punto de que en los primeros 23 minutos vieron dos tarjetas amarillas Seys y Jashari. En el minuto 34, Christian Pulisic sacó una parábola perfecta directamente del larguero, Mignolet se dejó engañar y el gol olímpico estaba servido: 1-0.
Cinco minutos antes del final de la primera parte se produjo otro punto de inflexión: un violento choque entre Onyedika y Reijnders; tras la revisión sobre el terreno de juego llegó el veredicto del árbitro Zwayer, que expulsó al nigeriano. El resultado al descanso fue de 1-0 a favor del Milan, que pudo disfrutar de superioridad numérica.
A pesar del hombre de más, los nerazzurri empataron en el minuto 51: Sabbe tuvo tiempo de recibir un pase de Vetlesen en el área y remató a la red, con Maignan inmóvil, que sólo pudo ver cómo entraba el balón. Con 1-1, el Milan tuvo que reorganizarse y en el minuto 60 Fonseca introdujo a Okafor y Chukwueze en lugar de Loftus-Cheek y Rafael Leao, que abandonaron el terreno de juego no demasiado contentos.
Segundos después de las dos sustituciones, Okafor ya fue decisivo: su pase raso desde la izquierda encontró a Reijnders libre para rematar de cabeza desde dentro del área, poniendo el 2-1 para los rossoneri y dando un suspiro de alivio a la afición tras unos minutos de desbandada. Diez minutos más tarde llegó el 3-1, de forma muy parecida: esta vez fue una asistencia de Chukwueze, pero fue Reijnders el que se encargó de que el balón entrara en la portería.
El ritmo bajó en los compases finales, pero fue Francesco Camarda, que entró por Morata en el minuto 75 (y Musah por Fofana), quien se convirtió en el italiano más joven en debutar en la Liga de Campeones, con 16 años y 226 días, superando el récord que hasta entonces ostentaba Moise Kean, que tenía 41 días más cuando debutó en la máxima competición europea con la camiseta del Juventus.
Fue el propio Camarda quien se comió las manos en el minuto 87: su espléndido cabezazo habría supuesto el 4-1, de no haber sido por una posición irregular del joven delantero, que sí entró en el acta, de no ser por la tarjeta amarilla posterior a su júbilo, durante el cual se había quitado la camiseta. Si el gol hubiera sido válido, Camarda se habría convertido en el goleador más joven de la historia de la Liga de Campeones: el récord, por ahora, sigue en poder de Ansu Fati (17 años y 40 días).
Con el pitido final, sin embargo, el Milan se impuso por 3-1 al Club Brujas: los tres primeros puntos de los rossoneri en la clasificación, que acompañan a los belgas en la tabla. Próximo compromiso europeo el 5 de noviembre, en la guarida del Real Madrid dirigido por un ex particularmente querido por los rossoneri, Carlo Ancelotti.