Jannik Sinner llega y se va inmediatamente después de Wimbledon: se salta la fiesta de Bolzano
El avión privado que transportaba a Jannik Sinner, recién coronado campeón de Wimbledon, aterrizó en el aeropuerto Dolomiti de Bolzano tras un vuelo de casi dos horas, procedente de Northolt, Londres, cuando faltaba un cuarto de hora para las cinco de la tarde del lunes. El tenista número 1 del mundo se limitó a dar unos pasos por la escalerilla para estirar las piernas e inmediatamente después volvió a subir a bordo.
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Desembarcaron su hermano Mark, el mánager Alex Vittur, el responsable de redes sociales Alex Meliss y sus respectivos acompañantes, que se dirigían en coche al Val Pusteria. Con Sinner no estaban sus padres, Siglinde, que se ha convertido en la reina de la red por sus maneras elegantes y discretas, y Hanspeter.
Según el plan de vuelo, hacia las seis de la tarde el avión partió hacia Milán Linate. Para consternación de los numerosos y jóvenes fans que esperaban en el aeropuerto para hacerse selfies y firmar autógrafos, mientras las instalaciones estaban custodiadas por la policía, los carabinieri y la Guardia di Finanza.
El aeropuerto estaba lleno de gente.
Alguien, detrás de la valla, consiguió sin embargo fotografiar de lejos al as de la raqueta mientras sonreía al embarcar en el avión rumbo a su próximo destino, presumiblemente Montecarlo, abandonando momentáneamente sus queridas montañas para relajarse tras su gran hazaña en Londres.
Los jóvenes fans le esperaban para hacerse un selfie.
