El campeón paralímpico Carlo Calcagni figura entre las excelencias de Apulia
En el espléndido marco del Aula Magna del Departamento Jónico – Sede de la Jurisprudencia (Ex Caserma Rossarol), en Via Duomo 259 de Taranto, se celebró la ceremonia oficial de entrega de los premios Eccellenze Pugliesi Avviso C 2024, promovidos por la Región de Apulia en el marco del Programa Anual de Políticas de Juventud.
.
Entre los protagonistas de esta jornada tan especial se encontraba el Coronel del Rol de Honor del Ejército Italiano, Carlo Calcagni, atleta paralímpico, Víctima del Deber, Herido y Mutilado por el Servicio, símbolo vivo de fortaleza de espíritu, amor por la vida y testigo activo contra la indiferencia y la injusticia.
El reconocimiento que la Región de Apulia ha querido otorgarle se inscribe en el ámbito de la Convocatoria C –Acciones para la valorización de los talentos y la excelencia apulianos– dando testimonio de una trayectoria vital extraordinaria que, entre batallas personales, sacrificios y logros deportivos internacionales, ha sabido transformar el dolor en misión, y la enfermedad en oportunidad de renacimiento.
“Me siento profundamente honrado de recibir este reconocimiento de mi tierra– subraya Calcagni – Apulia es raíces, identidad y orgullo. Quiero compartir este momento con quienes han creído en mí, con quienes caminan a mi lado y con todos aquellos jóvenes que hoy, más que nunca, necesitan ejemplos concretos y verdaderos, capaces de inspirar y generar esperanza”.
.
Calcagni decidió dedicar el premio a todas las víctimas del deber, de todos los tiempos y lugares: “Dedico este premio a los Servidores del Estado, a menudo olvidados por el mismo Estado al que hemos servido con honor. Mi pensamiento se dirige también a nuestras familias, que son nuestro escudo, nuestra ancla, nuestra fuerza. Sólo gracias a ellos no nos sentimos abrumados por la indiferencia que nos rodea y por la enfermedad. Pero es triste pensar en los muchos compañeros que no lo han conseguido”.
Y luego, añadió, con la fuerza que le caracteriza: “Para mí, la carrera más importante es la que se hace contra la enfermedad. Por eso corro. Doy gracias todos los días a Dios, a la ciencia y al deporte, que me permiten seguir aquí, y vivir de verdad, en el sentido más profundo de la palabra”.
