Milan, la remontada a medias: amargo empate en Lecce
Lecce – AC Milan 2-2 en el partido de las 18:00
Llamado a responder a la fuerte señal enviada por el Nápoles -y a volver a la senda de la victoria tras el burlón empate contra el Roma-, el AC Milan no acudió a su cita con la victoria en Lecce.
El comienzo del partido fue literalmente una pesadilla para el equipo de Stefano Pioli. En rápida sucesión llegaron el gol rossonero -gracias a un torpe autogol de Theo Hernández en el minuto 3-, una colosal ocasión devorada por Di Francesco en el minuto 5, y el doblete del Lecce, con Baschirotto perforando la meta de Tatarusanu en el segundo palo en el minuto 23. Milan parecía en estado de shock, incapaz de reaccionar. Pobega y Giroud lo intentaron, pero sin mucha convicción, y así la primera parte se escapó con dos goles de ventaja del Lecce.
En la segunda parte la música parecía otra: Pioli cambió a Saelemaekers por Junior Messias y a un desastroso Hernández por Dest. La convicción de los meneghini era otra, y en el minuto 58 Leao sorprendió a Falcone en el primer palo al final de una acción que había llevado al delantero centro francés del Milan al remate. Luego, en el minuto 70, fue Calabria quien dio el empate a los visitantes con un remate de cabeza a pase de Giroud. El resto del partido fue un monólogo rossonero, con la mejor ocasión en el minuto 78: el poste de Junior Messias. Sin embargo, la acción se vio viciada por un fuera de juego posterior pitado por el árbitro Orsato. En los minutos finales, el Lecce se acercó peligrosamente a Tatarusanu, que corrió el riesgo de encajar un segundo gol en propia meta tras el desvío de Tomori de un centro de Gallo.
Terminó 2-2, el Nápoles se escapó a +9 y Stefano Pioli tuvo que aplazar una vez más la cita con los tres puntos. Al día siguiente, los meneghini viajarán a Roma para disputar el exigente partido a domicilio en casa del Lazio.