Franco Casalini, el emotivo recuerdo de Ettore Messina
Franco Casalini, el emotivo recuerdo de Ettore Messina
El fallecimiento de Franco Casalini ha sacudido profundamente el baloncesto italiano. Ettore Messina quiso recordarlo así a través de los canales sociales del Olimpia: «En mi primer año como entrenador jefe, en 1989, Franco Casalini era un técnico joven pero ya consolidado. Además de ser el histórico y famoso ayudante de Dan Peterson en el Milán de los años 80, ya había demostrado todas sus cualidades como entrenador ganador. Inmediatamente después de la Copa Intercontinental, ganó la Copa de Campeones en 1988″.
‘Era el gran Olimpia, pero repetirlo era una hazaña y además había sustituido a algunos de la vieja guardia como Gallinari y Franco Boselli por jugadores más jóvenes como Aldi y Montecchi, dando más espacio al jovencísimo Pittis. En resumen, para todos nosotros, los jóvenes entrenadores, era un modelo, era alguien que lo había conseguido. Ese año -repito, el primero como seleccionador- Casalini era el vigente campeón de Italia y, como tal, tenía derecho a entrenar en el Partido de las Estrellas».
«Podía haber elegido a cualquier entrenador para ser su ayudante, haber elegido a un entrenador consagrado de los muchos que había en aquella época, gente que merecía reconocimiento y escaparate. Sorprendentemente, me eligió a mí. No lo esperaba. No sé por qué tomó esa decisión, pero siempre lo he considerado un gesto amable, hacia un novato, que me impresionó mucho. Me dio la oportunidad de conocer a los muchos grandes campeones extranjeros que jugaban en la Serie A esa temporada. Le estaré eternamente agradecido. Así fue como conocí, en la intimidad de un partido, a una persona dulce, educada, leal, un muy buen entrenador que era modesto en sus actitudes a pesar de ser ya Casalini, el entrenador italiano más joven en ganar una Copa de Campeones, alguien que se había hecho un nombre año tras año en un club como el Olimpia».
En todos los años que siguieron, incluso cuando nuestros caminos se separaron profesionalmente, mis sentimientos del primer momento se confirmaron. Casalini era eso: amable, leal y -lo toqué con mis propias manos a lo largo de los años- muy enamorado de Olimpia. Siempre podré decir, con orgullo, al despedirme de él, que fue estupendo ser su asistente, aunque sólo fuera por un partido», concluye el mensaje de Messina.