Tadej Pogacar hace una admisión después de Alpe d’Huez

©Getty Images

El esloveno sigue segundo en la clasificación general

Los que esperaban una reacción de Tadej Pogacar tras la decepción del miércoles en la subida al Alpe d’Huez quedaron satisfechos a medias: el esloveno aguantó el pulso con el maillot amarillo Jonas Vingegaard, terminando en el mismo pequeño grupo a más de 3′ del ganador de la etapa, Pidcock, pero no pareció ser el Pogacar dominante de las dos últimas ediciones de la Grande Boucle.

Al final de la etapa, Pogacar admitió a ‘L’Equipe’ que sintió la reacción de ayer: «No estaba tan confiado como quería», dijo, «creo que podría haberlo hecho mejor». Las sensaciones de hoy, sin embargo, han sido buenas».

«Esperaba que los chicos del Jumbo-Visma controlaran la carrera, tienen un equipo muy bueno», continuó explicando Pogacar sobre el equipo que apoya a Vingegaard, «cuando intenté atacar, Jonas nunca contraatacó, lo que me hubiera gustado porque me hubiera permitido responder a su vez. Simplemente me siguió y no fui lo suficientemente rápido para crear un hueco».

«Sin embargo, el camino aún es largo, estoy preparado para las etapas que vienen. Sé por qué sufrí el miércoles, gasté demasiada energía subiendo el Galibier. No volverá a ocurrir. Jonas es súper fuerte, pero ambos lucharemos hasta el final», concluyó el esloveno.

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